Dicen que después de la tormenta, sale el
sol... y parece que algo parecido sucedió con El Portón F.C. Luego de un
semestre pobre, con idas y vueltas dentro de su plantel, con caras nuevas, con
altibajos futbolísticos, y con una racha negativa de resultados, el equipo
volvía a presentarse en un nuevo torneo en la sede de Muni Club. La hinchada y
sobre todo la historia del club obligaba al equipo a cambiar el mal momento del
último campeonato y pelear bien arriba este nuevo torneo.
De esta manera y con la nueva incorporación del
mediocampista Nicolás Dermijian al equipo, El Portón hacía su debut en la
primera fecha con un triunfo que entusiasmaba y permitía soñar en grande. Lo
mismo sucedió en la segunda fecha cuando los naranjas volvieron a ganar al
igual que en la tercera y en la cuarta. El mal momento parecía haber pasado y
los fantasmas del mal juego se iban disolviendo de a poco; el equipo a medida
que pasaban las fechas se iba aceitando y tomando un buen ritmo, y esto se veía
acompañado por los buenos resultados.
Los fanáticos se empezaban a ilusionar con un
nuevo campeonato y como no también con el tan ansiado ascenso a la Primera A, y
como no hacerlo si El Portón se clasificaba primero e invicto luego de once
fechas en la fase de grupos y se le habría de esta manera la posibilidad de
jugar la Copa de Oro y pelear símultáneamente por el campeonato y el ascenso,
objetivos que sin lugar a duda se había propuesto lograr a principio de año.
De solo pensar como había sido el final del
campeonato anterior, y el mal cierre de año que había tenido el equipo, difícil
era imaginar que en tan poco tiempo se iba a recuperar y mucho menos estar
peleando por cosas importantes.
Sin lugar a duda se había llegado a una
instancia importante y lejana, y ese era un logro muy meritorio, pero como
siempre ocurre en el fútbol, cuando uno se acostumbra a ganar no se conforma
con otra cosa que no sea la victoria y la gloria.
El Portón se jugaba a todo o nada en esta Copa
de Oro, y de esta manera encaraba su primer partido, sabiendo que era de vida o
muerte, y que dependiendo del resultado seguía camino a su sueño, o este se
terminaba igual o más rápido de como había llegado.
De un momento al otro, el partido estaba en
juego, y parecía no estar viendo al mismo equipo que había llegado a esa
instancia, sino al viejo Portón, y eso se vio reflejado en el resultado final,
luego de una amplia y dolorosa derrota por 6 a 2.
El castillo de arena que se había logrado
construir durante toda la fase de grupos se desmoronó en poco más de cuarenta
minutos de juego, y todas las esperanzas y sueños se habían terminado.
Nuevamente aparecían las dudas en los jugadores
del equipo y las caras y ánimos no eran los mejores, luego de tanto trabajo se
quedaban con las manos vacías, pero como siempre en la vida y sobre todo en el
fútbol, suele haber oportunidades para las revanchas, y así fue como El Portón
tenía aún una posibilidad más para conseguir el ascenso dejando atrás el
campeonato perdido.
Pese a la eliminación en la Copa de Oro, los
naranjas habían entrado al Repechaje por el ascenso, el cual debían ganar si o
si para conseguir el pasaje a la A.
Poco era el tiempo que había como para cambiar
el chip interno y dejar atrás el trago amargo de la semana pasada, y los
jugadores lo entendieron a la perfección.
Al igual que en la Copa de Oro, en el repechaje
también había eliminación directa con lo cual no había margen de error; el que
ganaba ascendía.
El Portón se vería las caras con Franco
Canadiense, un equipo totalmente desconocido y por la última actuación, era una
incógnita saber como se desenvolvería el equipo naranja dentro de la cancha.
En una noche mágica de fútbol se llevó a cabo
el encuentro y El Portón jugo el partido como tal lo demandaba; con mucho
corazón y garra, sacando a relucir su historia y su juego, el cual lo llevó a
conseguir triunfos, alegrías y títulos. De esta manera y luego de un partido
vibrante y emocionante, con un resultado de 5 a 2
a favor de los naranjas, el juez hacía sonar su silbato
indicando el final del encuentro, y el tan ansiado y esperado ascenso a la
Primera A de El Portón.
Una vez más el equipo había demostrado que en
las malas es cuando más dice presente y se aferra a su garra para salir
adelante y superar los sobresaltos.
Cuando todo parecía estar perdido, luego de
aquella dolorosa e inolvidable derrota en la Copa de Oro, surgía esta nueva
posibilidad de pelear por el ascenso, y casi en un abrir y cerrar de ojos el
equipo se encontraba en la primera división, sin lugar a duda algo soñado por
todos los hinchas y jugadores y difícil de imaginar logar en tan poco tiempo.
Poco será el tiempo que tenga el equipo para
festejar el merecido ascenso y para volver a la realidad luego de esta gran
alegría ya que el torneo de la primera A arranca nada más ni nada menos que el Domingo
14 de Julio.
Se sabe lo que implica jugar en la máxima
categoría; la gran competitividad que hay, el gran nivel de juego de los
equipos, el poco margen de error, y sobre todo la responsabilidad que hay que
tener como equipo para adaptarse a esta nueva división.
Sin lugar a duda, el tiempo será quien vaya
adaptando poco a poco a los naranjas a la elite del torneo.
Lo que queda claro es que El Portón se gano un
lugar para estar entre los mejores del torneo y tratará de demostrarlo y
hacerse valer a lo largo del mismo.
Seguramente hay muchas cosas que mejorar como
equipo para poder conseguir resultados y un buen nivel de juego, pero la
institución cuenta con jugadores como para conseguirlo y eso es lo que
intentará realizar.
Solo resta prepararse físicamente y sobretodo
mentalmente para el inicio de esta nueva aventura...
Estará El Portón F.C preparado para jugar y competir en la Primera A...?
Estará El Portón F.C preparado para jugar y competir en la Primera A...?
EL PORTÓN F.C